Una alternativa al pan blanco tradicional con un sabor y una textura diferente.
La suavidad y la versatilidad del pan lo convierten en uno de los pocos ingredientes que se consideran un gusto universal. Siempre vas a quedar con ganas de uno más, sea con manteca o en unas bruschettas más elaboradas, con tomate, queso y orégano. Por eso, hoy les queremos enseñar una receta casera para preparar pan integral.
Nadie se niega a un pan para acompañar una bebida caliente o con una lasaña o una pasta, y quien quiera puede preparar este ingrediente desde casa. Conlleva práctica, paciencia y seguir los pasos al pie de la letra, pero el resultado es delicioso.
Adentrate en el mundo del pan integral con nosotros y aprendé cuáles son sus diferencias con el pan blanco, cómo prepararlo desde casa y cuáles son las clases de pan integral más reconocidas en todo el mundo.
Prepará tu harina, tus granos favoritos y tu horno para cocinar un pan integral que se convertirá en uno de tus favoritos.
¿EN QUÉ SE DIFERENCIA EL PAN INTEGRAL DEL TRADICIONAL?
La visita a una panadería siempre conlleva la misma incertidumbre: ¿qué pan llevo hoy? Es una elección difícil cuando hay tantas variedades, pero una de las maneras más simples para resolver esa pregunta es aprendiendo cuáles son las grandes diferencias de los panes. En esta ocasión, hablaremos sobre qué distingue un pan integral de un pan blanco tradicional.
Para empezar, los ingredientes para su preparación son muy diferentes desde el comienzo: el pan integral se prepara con harina integral (que incluye el salvado y el germen del grano, componentes que conservan nutrientes y fibra), mientras que el pan blanco se prepara con harina refinada.
Fuera de diferenciarse de su ingrediente base, el color, la textura y el sabor del pan también es diferente. El color del pan integral es más oscuro; su textura, sobre todo en la corteza, es más dura y densa, y su sabor es un poco más terroso y dulce. Por otro lado, el pan tradicional es sometido a un proceso de molienda fina y su índice glucémico es un poco más alto.
Creamos esta pequeña tabla comparativa en la que podés entender mejor las diferencias y conozcas a mayor profundidad los procesos y las características del pan integral.
Aprendé cómo crear una tabla de quesos variada y deliciosa.
| Característica | Pan Integral | Pan Tradicional |
| Ingredientes | Harina integral, levadura | Harina refinada, levadura |
| Color y Textura | Color oscuro, textura densa | Color claro, textura suave |
| Nutrientes | Rico en fibra, vitaminas y minerales | Menos nutrientes |
| Índice Glucémico | Bajo | Alto |
| Variedades | Multigrano, centeno, avena, etc. | Baguette, brioche, ciabatta, etc. |
Finalmente, tú eres quien decide qué tipo de pan se ajusta a tus gustos y a tus necesidades. Si buscás una opción más balanceada y que incluya más nutrientes, el pan integral podría ser tu favorito; si buscás un sabor suave y una textura ligera, el pan tradicional será tu aliado ideal.
PASO A PASO: RECETA CASERA DE PAN INTEGRAL
Ahora que conocés sus características y en qué se diferencia de los demás, podés empezar a preparar tu primer pan integral. Para esta receta, necesitás los siguientes ingredientes:
- 2 tazas de harina integral
- 1 taza de agua tibia
- 2 cucharaditas de levadura seca activa
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada de aceite de oliva
Esta es una receta base para un pan integral sencillo, pero recordá que la creatividad está en tus manos, pues esta es una receta personalizable. Le podés añadir semillas de chía, avena, pasas, nueces, zanahoria rallada o frutas deshidratadas.
Debés seguir este paso a paso para lograr un pan integral tradicional:
- En un bol chico, combiná la levadura seca activa con el agua tibia. Dejá reposar durante unos 5-10 minutos hasta que se forme una espuma en la superficie. Esto indica que la levadura está activa.
- En un bol grande, mezclá la harina integral y la sal. Si deseás agregar ingredientes adicionales como semillas de chía, avena o frutos secos, este es el momento perfecto. ¡Dejá volar tu creatividad y añadí lo que más te guste!
- Hacé un pequeño agujero en el centro de la mezcla de harina y verté la mezcla de levadura y agua. Agregá el aceite de oliva.
- Comenzá a mezclar los ingredientes con una cuchara de madera o tus manos hasta que se forme una masa. Si la masa está demasiado seca, agregá un poco más de agua tibia; si está muy pegajosa, agregá un poco más de harina.
- Amasá en una superficie ligeramente enharinada durante unos 5-7 minutos, hasta que esté suave y elástica.
- Volvé a colocar la masa en el tazón y cubrila con un paño húmedo. Dejá que la masa repose y aumente su tamaño durante aproximadamente 1 hora en un lugar cálido y libre de corrientes de aire.
- Una vez que la masa duplicó su tamaño, precalentá el horno a 180°C (350°F).
- Formá la masa como quieras: podés hacerla redonda, en baguettes, pancitos individuales, ¡lo que quieras!
- Colocá la masa en una bandeja para hornear previamente engrasada o forrada con papel pergamino. Cubrí nuevamente con el paño húmedo y dejá que la masa repose durante otros 15-20 minutos.
- Si deseás darle un toque especial, acá es donde podés personalizar aún más tu pan. Agregá ingredientes como zanahoria rallada, nueces picadas o cebolla caramelizada en la parte superior antes de hornear.
- Horneá en el horno precalentado durante 25-30 minutos, o hasta que el pan esté dorado y suene hueco al golpearlo ligeramente en la parte inferior.
- Sacá el pan del horno y dejalo enfriar en una rejilla antes de cortarlo en rebanadas.
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- Pan Integral de Centeno: poseé una intensidad de sabor que es característica del centeno. Su textura es densa y su miga compacta, lo que lo convierte en un acompañante ideal para quesos fuertes y embutidos. También es perfecto para las famosas rebanadas de pan de centeno con manteca. La fermentación prolongada mejora el sabor y la textura del pan. Si lo vas a preparar, ¡debés planificar con anticipación!
- Pan Integral de Espelta: la espelta es un antiguo grano que ha ganado popularidad en la panadería. Su sabor es suave y un poco dulce, y se asemeja al trigo, pero con un toque de nuez. Este pan es versátil y se puede disfrutar con mermeladas, cremas de queso o simplemente con un poco de aceite de oliva. Agregar pasas o frutos secos a la masa de espelta puede realzar su dulzura natural.
- Pan Integral de Zanahoria y Nuez: combiná la dulzura natural de las zanahorias ralladas con la textura crujiente de las nueces. El sabor es ligeramente dulce y las nueces añaden un agradable contraste. Ideal para acompañar sopas y ensaladas. Asegurate de escurrir bien las zanahorias ralladas para evitar un exceso de humedad en la masa.
- Pan Integral Multigrano: una auténtica fiesta de sabores y texturas con una combinación de granos enteros como avena, cebada, centeno y más. Su sabor es robusto y terroso, con un toque de dulzura proveniente de los granos. Ideal para sándwiches gourmet y tostadas por la mañana. Agregar semillas de calabaza o girasol a la masa añade un crujido extra.
- Pan Integral de Chía y Linaza: las semillas de chía y el sabor a nuez convierten a este pan en un acompañamiento perfecto para el desayuno o como base de sándwiches saludables. Te aconsejamos remojar las semillas de chía y linaza en agua antes de incorporarlas a la masa para asegurar una textura agradable.
FUENTES:
https://mejorconsalud.as.com/3-tipos-panes-integrales-1-receta-disfrutarlos/
https://blog.somosfit.com/blog/claves-para-un-pan-integral-perfecto
How to Bake Wholemeal Bread – Delia’s How to Cook | BBC Good Food