Agregale un toque crujiente a tus ensaladas, pastas y smoothies con estas semillas comestibles.
Los girasoles no solo son flores bellas y vibrantes, sino que también conservan en sus semillas un sabor y una textura que le pueden dar un toque extra a tus preparaciones.
Esta planta nativa de América del Norte conserva sus semillas, que son pequeñas, planas y ovaladas, en la cabeza floral del girasol. Además de ser nutritivas y ricas en diversas propiedades, las semillas de girasol pueden acompañar ensaladas, galletitas, panes y pastas de una manera extraordinaria.
Seguí leyendo y aprendé cómo cocinarlas, cuáles son los platos en los que las podés incorporar y qué otro tipo de semillas comestibles se recomienda utilizar en diferentes preparaciones.
CÓMO UTILIZAR SEMILLAS DE GIRASOL
Las semillas de girasol son versátiles y se prestan a diversas formas de preparación, permitiendo disfrutar de su delicioso sabor y beneficios nutricionales en una variedad de platos. Estas son algunas maneras de cocinarlas:
- Tostadas al horno: colocá las semillas de girasol en una bandeja para hornear y tostalas en el horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 10 minutos. Revolvelas ocasionalmente para asegurar un tostado uniforme. Este método resalta su sabor tostado y las hace ideales como aperitivo o para agregar a ensaladas.
- Salteadas: calentá una sartén a fuego medio y añadí las semillas de girasol. Remové constantemente hasta que estén doradas y emitan un aroma tostado. Este método es rápido y agrega un toque crujiente a platos como ensaladas, sopas o vegetales salteados.
- Con cubierta: podés derretir el dulce o el chocolate que prefieras y luego, sumergir las semillas de girasol en él. Luego, colocalas en una bandeja y llevalas a la heladera hasta que la cubierta se endurezca. Esta opción combina el dulce con la textura crujiente de las semillas, perfecta para un snack de media tarde.
- Mezcla de granola: combiná semillas de girasol con frutas deshidratadas, frutos secos y cereales integrales para crear una mezcla de granola casera. Agregale yogur, leche o simplemente consumilas como aperitivo energético.
Salsa o pesto: triturá las semillas de girasol con aceite de oliva, ajo, queso parmesano y albahaca para obtener una salsa o pesto diferente y deliciosa. Usala como aderezo para pasta, ensaladas o como dip.
- Espolvoreadas en ensaladas o sopas: añadí las semillas de girasol tostadas como topping en tus ensaladas o sopas. No solo van a aportar un toque crujiente, sino también nutrientes adicionales.
- En panes y repostería: incorporá semillas de girasol en la masa de pan, galletitas o muffins para agregar un sabor y textura únicos. Tostarlas antes de añadir a la mezcla resalta aún más su perfil de sabor.
- Aderezo para carnes o pescados: triturá las semillas de girasol con hierbas frescas, ajo y aceite de oliva para crear un aderezo delicioso para carnes o pescados.
Experimentá con estas opciones y descubrí cómo las semillas de girasol pueden mejorar tus platos.
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10 RECETAS DELICIOSAS CON SEMILLAS DE GIRASOL
Como podés ver, las semillas de girasol son muy prácticas y fáciles de cocinar. Ahora es solo cuestión de elegir el plato y la receta que querés preparar hoy. Te contamos 10 opciones que podés hacer desde casa.
- Granola casera con semillas de girasol: las semillas de girasol aportan un delicioso toque tostado y un sabor ligeramente amaderado a la granola. Para mantener su textura crujiente, asegurate de tostarlas antes de agregarlas a la mezcla. Transformá tu desayuno con esta opción saludable y sabrosa.
- Galletitas integrales con semillas de girasol: incorporá las semillas de girasol a tus galletitas integrales para darles un giro saludable y lleno de sabor. Su textura crujiente y su sabor ligeramente tostado complementan perfectamente la mezcla de harinas integrales. Experimentá agregando canela para un toque extra de dulce.
- Sopa de calabaza con semillas de girasol: al servir una cremosa sopa de calabaza, espolvoreá semillas de girasol tostadas en la parte superior para un contraste delicioso. Las semillas añaden textura y un sabor que realza la experiencia. Probá sazonar con un toque de pimienta negra para equilibrar los sabores.
- Yogur con frutas y semillas de girasol: dale un toque nutritivo a tu tazón de yogur en las mañanas agregando semillas de girasol. Su sabor a nuez complementa tanto las frutas frescas como las secas. Optá por miel como endulzante natural y disfrutá de un desayuno o merienda equilibrado y delicioso.
Ensalada de hojas verdes con semillas de girasol: las semillas de girasol añaden un sabor ligeramente a nuez a la frescura de las hojas verdes. Elevá tus ensaladas a un nuevo nivel con este toque nutritivo.
- Pan integral con semillas de girasol: hacé tu propio pan integral en casa y agregá semillas de girasol para mejorar su textura y sabor. Las semillas aportan un crujido suave y un sabor tostado. Combiná con palta y huevos revueltos para una opción de desayuno.
- Pasta con pesto de semillas de girasol: prepará un pesto diferente al tradicional usando semillas de girasol en lugar de piñones. Vas a obtener una salsa cremosa y deliciosa que se adhiere perfectamente a la pasta. Exprimí un poco de limón para resaltar los sabores.
- Smoothie bowl con semillas de girasol: dale un toque crocante a tu smoothie bowl espolvoreando semillas de girasol. Además de su sabor, añaden un elemento decorativo. Complementá con frutas frescas, granola y un toque de coco rallado para una experiencia completa.
- Avena con semillas de girasol y miel: mejorá tu tazón de avena clásico incorporando semillas de girasol y un toque de miel. Las semillas aportan un contraste crujiente, mientras que la miel agrega dulzura natural. Experimentá con frutas como bananas o frutillas para variar los sabores.
- Tarta de chocolate con semillas de girasol: un sabor tostado y nuevo a esa tarta de chocolate que encanta a muchos. Las semillas se mezclan armoniosamente con el chocolate, creando un postre dulce y nutritivo. Decorá con frutos rojos para un toque fresco.
Recetas con semillas
OTROS TIPOS DE SEMILLAS COMESTIBLES QUE PODÉS UTILIZAR
Existe una gran variedad de semillas comestibles que podés incluir en tus platos, además de las semillas de girasol. Acá te contamos algunas de las opciones que podés encontrar en tu supermercado más cercano.
- Semillas de sésamo: disponibles en versiones blancas o negras, las semillas de sésamo aportan un delicioso sabor a nuez. Se utilizan comúnmente en panadería, ensaladas y platos asiáticos.
- Semillas de calabaza: esta semilla proporciona un toque diferente a ensaladas, yogures o incluso como snack. También se pueden usar para hacer pesto.
- Semillas de lino: las semillas de lino molidas son una excelente adición a batidos, cereales o productos horneados.
- Semillas de cáñamo: con un sabor suave y una textura crujiente, las semillas de cáñamo se pueden espolvorear sobre ensaladas, cereales o yogures.
Semillas de amapola: estas pequeñas semillas tienen un sabor ligero y se utilizan comúnmente en panadería para agregar textura y un toque de nuez a panes y tortas.
- Semillas de amaranto: las semillas de amaranto son versátiles y se pueden cocinar como cereal, agregar a ensaladas o utilizar en la elaboración de barras energéticas.
- Semillas de quinoa: aunque comúnmente se consume como grano, la quinoa es técnicamente una semilla. Se puede utilizar en ensaladas, guisos o como guarnición.
Contanos en los comentarios cuáles son tus semillas comestibles favoritas y cómo las preparás. Seguí explorando nuevas formas de cocinar en Recetas Nestlé, donde aprendes cómo utilizar los ingredientes de tu cocina.
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FUENTES: