También compartimos algunas ideas para cocinar durante las fiestas de diciembre
Con la llegada de diciembre y todas las celebraciones que esto implica, debemos pensar en platos que podamos compartir con toda nuestra familia. Las ensaladas navideñas no pueden faltar durante este mes, por eso tenemos algunos consejos para preparar las mejores y unas cuantas ideas para cocinar.
RECOMENDACIONES PARA PREPARAR ENSALADAS NAVIDEÑAS
Una de las grandes cualidades de las verduras es que son de varios colores, así que podemos aprovechar esta propiedad para hacer nuestras ensaladas navideñas más atractivas. Pensemos, además, en el verde y el rojo, colores característicos de esta época. Adicionalmente se habla de texturas, de su valor nutricional y de alimentos más allá de las verduras.
Sin embargo, recordemos que estamos hablando de una ensalada, un plato ligero, así que las recomendaciones no son para usar al mismo tiempo, puesto que el resultado puede ser muy pesado. En cambio, recomendamos elegir dos o tres alimentos adicionales y jugar con ellos en cantidades moderadas.
A continuación, compartimos algunos tips.
NO PODEMOS OLVIDAR LOS GRANOS
Las grandes estrellas en las ensaladas son las verduras. Aportan sabores y texturas, pero siempre podemos añadir otros tipos de alimentos para continuar jugando con estas características. Además, también ayuda a crear un plato más saciante.
El uso de alimentos como porotos, lentejas o garbanzos es muy recomendado. Por un lado, pueden crear contrastes de texturas, pero también se ven bien como decoración (detalles que cuentan) y, lo que más nos importa, saben delicioso y aportan un gran valor nutricional. Incluso, un poco de hummus de garbanzo es una idea para considerar.
AÑADIR ALGÚN CEREAL
Si no tenemos granos a la mano, otro tipo de alimento al que podemos acudir son los cereales. Acá es posible jugar con los colores. Por ejemplo, el amarillo del maíz puede darle un nuevo tono a una ensalada navideña, como si fuesen estrellas en nuestro plato.
Por otro lado, el arroz blanco en cantidades moderadas también funciona para hacer una receta más contundente, sin llegar a ser pesada. La quinoa, por su parte, va de maravilla en cualquier ensalada, así que la recomendamos bastante.
Incluso se pueden usar sobras de otros platos. Un buen cuscús combina de forma excelente con los vegetales.
SEMILLAS, PEQUEÑOS DETALLES QUE APORTAN
Puede que por su tamaño se vean inofensivas, pero las semillas pueden convertirse en el arma secreta de cualquier cocinero aficionado para darle un giro personal a sus platos. Si nos enfocamos en las ensaladas, únicamente hay que añadirlas cuando vamos a servir el plato.
Se sienten en cada bocado y aportan textura, aunque por ser tan pequeñas son muy discretas, sobre todo las de chía, sésamo y lino. Por otra parte, las de calabaza son más grandes, pero también son un muy buen complemento.
Un tip antes de continuar: recomendamos añadir los tres últimos ejemplos que hemos dado, granos, cereales y semillas, cuando ya estamos terminando de preparar la ensalada. De esta forma, los más pequeños no van a quedar en el fondo y, además, se podrán ver y llamar la atención.
APROVECHEMOS LAS SOBRAS
Cuando preparamos una salsa, un guiso o cualquier otro plato en el que usamos verduras, es posible que nos sobren algunas que todavía guardamos en la heladera. Un trozo de zanahoria puede cortarse en cuadros pequeños para entregar textura y color, así como unas tiras de morrón.
Puede que estos ingredientes no vayan a tener un gran protagonismo (seguramente no contamos con muchísimas sobras), pero sí son estupendos para complementar nuestra ensalada navideña con pequeños detalles que marcan la diferencia.
UN TOQUE FRUTAL
Las ensaladas, usualmente, son saladas. Aunque podemos encontrar otros sabores gracias a los aderezos y ciertos ingredientes, no es muy común hablar de preparaciones de este estilo que sean dulces.
Sin embargo, esto no quiere decir que no puedan tener un ligero toque de este delicioso sabor en algunos bocados. ¿Vamos a usar azúcar? ¡Claro que no! Lo que necesitamos son algunas frutas que combinen con nuestra ensalada.
- Cítricos: acá tenemos al limón, la naranja y la mandarina. Del primero podemos aprovechar su jugo para añadir un elemento ácido, mientras que los otros dos ejemplos funcionan mejor en rodajas. Además, también aportan colores que ayudan en su impacto visual.
- Frutos rojos: acá tenemos una gran variedad de opciones, por ejemplo, fresas, moras y frambuesas, entre otros. Sobresalen por tener ese sabor dulce que funciona como un contraste exquisito, sin mencionar sus cualidades en términos de colores y figuras.
- Frutos deshidratados: una tercera opción que es un poco más sutil, pero que no deja de ser fabulosa. Además, esa textura suave es algo que, hasta ahora, no habíamos tenido en cuenta.
- Otras frutas: las manzanas (verdes o rojas), el mango, la pera, la papaya, el melón y el ananá son otras alternativas que recomendamos explorar. Las manzanas, además, son muy populares en las ensaladas navideñas (pensemos de nuevo en los colores), así que debemos tenerlas a la mano.
RECETAS DE ENSALADAS:
IDEAS DE ENSALADAS NAVIDEÑAS
Existen preparaciones clásicas y otras que son deliciosas, aunque no sean muy tradicionales durante la época de Navidad. Al final, lo importante es disfrutar de la comida con nuestras familias en esta temporada llena de amor y platos exquisitos.
10 ENSALADAS PARA ESTA TEMPORADA
Tras explorar las cualidades que puede tener una buena ensalada navideña, como la importancia del color, las texturas y los alimentos más allá de las verduras, es momento de mirar algunos ejemplos.
1. Ensalada de manzana clásica: si hablamos de guarniciones clásicas en Navidad, las distintas variedades de la ensalada de manzana siempre funcionan de maravilla. Puede que algunas sean más cremosas que otras, que incluyan frutos secos o frutas deshidratadas (o las dos), pero la base de manzana y pasas no debe faltar.
2. Ensalada Nochebuena: el 24 de diciembre es uno de los días más importante de esta temporada, pues es cuando muchas familias y amigos se reúnen para celebrar la Nochebuena alrededor de platos maravilloso y unos cuantos regalos. La ensalada que lleva este nombre se prepara con remolacha en cubos, un toque de naranja (que aporta sabor) y una textura cremosa. A esto se le pueden añadir distintos elementos.
3. Ensalada de zanahoria: únicamente hablando de estos tres primeros ejemplos ya encontramos algo en común, y es que la ensalada de manzana, la de Nochebuena y la de zanahoria son cremosas. En este caso, la zanahoria se corta en tiras largas y suele estar acompañada de algunas frutas.
4. Ensalada de papa: continuamos con opciones que tienen ese toque cremoso, esta vez una preparación clásica en el mundo de las ensaladas. Aunque su base es la papa, podemos jugar con arvejas, jamones, zanahorias y hasta quesos cortados en cuadros.
5. Ensaladas con base de hojas verdes: sobre una cama de verduras de hojas verde (lechuga, espinacas, rúgula) se pueden preparar una inmensa variedad de ensaladas. Podemos jugar con algo clásico, como tomates y cebolla, o experimentar con frutas y frutos secos. También tenemos a nuestra disposición queso rallado o en cubos.
6. Ensalada de frutas: ¿quién dijo que las ensaladas navideñas deben ser de verduras? Las que se preparan usando únicamente frutas son muy ricas y, además, también las podemos usar como un postre cuando se acerca la media noche. ¿Cómo le damos ese toque de diciembre? Con los colores, por eso es mejor enfocarnos, por ejemplo, en las uvas, la manzana, los frutos rojos o el kiwi.
7. Ensalada Waldorf: todo un clásico entre las ensaladas que, seamos sinceros, viene bien en cualquier momento del año, pero si la preparamos para Navidad seguramente va a tener ese elemento festivo y lleno de alegría de esta época. Lleva manzana, uvas, apio y nueces, mezclados con mayonesa y sobre una base de lechugas.
8. Ensalada de quinoa: a medida que la quinoa se vuelve más popular, cada vez la encontramos en una mayor cantidad de ensaladas. Sirve para jugar con los colores, puesto que, si la usamos como base, debido a su color, cualquier verdura puede contrastar y destacarse. El pepino, el rábano, los tomates y el apio funcionan muy bien.
9. Ensalada de repollo: hemos tenido a las papas, la quinoa y la zanahoria, entre otros, como protagonistas. Acá vamos a sacarle provecho tanto al repollo blanco, como al morado, para usarlos en una preparación cremosa que suele llevar manzana en trozos.
10. Ensalada de papa, queso y zanahoria: en este caso queremos cortar estos tres ingredientes en cubos pequeños, pues van a ser la base de esta ensalada navideña que también puede llevar apio. La mayonesa no debe faltar porque, una vez más, hablamos de un ejemplo cremoso.
Fuentes: