Este amasijo horneado y condimentado con finas hierbas se asemeja mucho a la masa de la pizza; perfecto para cualquier hora del día.
La focaccia es un tipo de pan plano y esponjoso, típico de la cocina italiana. Su masa se asemeja a la de la pizza, pero es más gruesa y generalmente se condimenta con aceite de oliva, sal gruesa y hierbas como el romero. En algunas versiones, se le agregan otros ingredientes como tomates, aceitunas, cebolla o queso. La focaccia se hornea a alta temperatura, lo que le otorga una corteza dorada y crujiente mientras mantiene un interior suave y aireado.
El origen de la focaccia se remonta a la antigua Roma, donde se elaboraba un pan llamado ‘panis focacius’, que se cocinaba en un ´focus’, una especie de chimenea o fogón. La focaccia, tal como la conocemos hoy, tiene sus raíces en la región de Liguria, en el noroeste de Italia, especialmente en la ciudad de Génova. Con el tiempo, la focaccia se extendió por toda Italia y más allá, adoptando variaciones regionales que incorporan diferentes ingredientes y métodos de preparación, pero siempre manteniendo su esencia como un pan sabroso y versátil.
CON QUÉ SE COME LA FOCACCIA ITALIANA
Aunque parece un simple aperitivo para entre comidas, o como entrada a un plato fuerte, la focaccia italiana cuenta con varias posibilidades a la hora de servirse. Estas son las 10 ideas para acompañar tu focaccia italiana:
- Queso burrata y tomates cherry: serví la focaccia con burrata cremosa y tomates cherry frescos, sazonados con un toque de aceite de oliva y albahaca.
- Prosciutto y melón: acompañá la focaccia con rodajas de prosciutto y melón dulce, un clásico contraste de sabores italianos.
- Aceitunas marinadas y aceite de oliva: disfrutá de la focaccia con aceitunas marinadas en hierbas y una variedad de aceites de oliva para mojar.
- Caprese de mozzarella, tomate y albahaca: hacé una ensalada caprese clásica para disfrutar junto a la focaccia, con mozzarella fresca, rodajas de tomate y hojas de albahaca.
Antipasto de embutidos y quesos: creá una tabla de quesos como salame, mortadela y diversos quesos, para un festín de sabores italianos complementado con tu focaccia.
- Sopa minestrone: serví la focaccia como acompañamiento de una sopa minestrone caliente y reconfortante.
- Hummus de garbanzo y aceitunas: combiná la focaccia con un cremoso hummus y unas aceitunas negras para una exquisita y tradicional mezcla mediterránea.
- Pesto de albahaca y parmesano: utilizá la focaccia para mojar en un pesto fresco de albahaca y queso parmesano.
- Ensalada de rúcula y parmesano: acompañá la focaccia con una ensalada ligera de rúcula, lascas de parmesano y un toque de limón.
- Peperonata: prepará una peperonata, un plato de morrones cocidos con tomate y ajo, para disfrutar junto a la focaccia como un acompañamiento rústico y sabroso.
¿La focaccia italiana es lo mismo que la pita?
Las similitudes entre la focaccia italiana y la pita son más que notables; ambas son un tipo de pan plano que se puede acompañar con quesos, carnes frías, quesos, vegetales, cremas, salsas y demás. Sin embargo, aunque son varias sus semejanzas, son más sus diferencias. Diferenciá estas dos preparaciones a través del siguiente listado de características:
Origen y preparación:
- Focaccia: es un pan italiano que tiene sus raíces en la antigua Roma; su masa se deja leudar, lo que da como resultado un pan más grueso y esponjoso. Generalmente se hornea en una bandeja grande, lo que le da una forma rectangular, o circular, y se suele sazonar con hierbas como el romero y sal gruesa.
- Pita: es un pan típico del Medio Oriente y el Mediterráneo, que se caracteriza por su forma plana y redonda. La pita se hace con una masa simple de harina, agua, levadura, y sal, con muy poco o nada de aceite. A diferencia de la focaccia, la masa de la pita se hornea rápidamente a alta temperatura, lo que provoca que se infle y forme un bolsillo en el centro. Este bolsillo es una de las características distintivas de la pita, permitiendo que se utilice como pan relleno.
Textura y uso:
- Focaccia: es más gruesa y esponjosa, con una corteza crujiente y un interior suave. Se sirve como acompañamiento o como base para sándwiches, y se disfruta tanto sola como con aceites y salsas para mojar.
- Pita: es más delgada y tiene una textura más masticable. Debido a su bolsillo interior, la pita se utiliza comúnmente para hacer sándwiches rellenos (como el gyro o el falafel) o se corta en trozos para mojar en hummus y otros dips.
En resumen, mientras que la focaccia es un pan esponjoso y grueso típico de Italia, la pita es un pan plano y delgado del Medio Oriente, conocido por su capacidad de formar un bolsillo perfecto para rellenar.
Recetas mediterráneas
CÓMO HACER UNA FOCACCIA ITALIANA CON TOPPINGS LATINOAMERICANOS DESDE TU COCINA
Pese a que es un pan tradicional de Italia, la focaccia es una preparación tan sencilla que podés hacerla desde tu cocina y hacerla pasar por un delicioso regalo traído desde Europa. Leé atentamente el siguiente paso a paso y ponelo en práctica para deleitar a todo el mundo:
Ingredientes:
Para la masa:
- Harina de trigo
- Agua tibia
- Sal
- Azúcar
- Levadura seca
- Aceite de oliva extra virgen
- Dientes de ajo picados finamente
- Orégano seco
Para los toppings latinoamericanos:
- Queso fresco o queso costeño desmenuzado
- Palta madura en rodajas finas
- Chorizo o longaniza cortado en rodajas finas
- Jalapeños en rodajas (opcional para un toque picante)
- Choclo tierno (opcional)
- Cilantro fresco picado
Instrucciones:
- Preparar la levadura: en un bowl pequeño, mezclá el agua tibia con el azúcar y la levadura seca. Dejá reposar por unos 10 minutos, hasta que la mezcla esté espumosa.
- Preparar la masa: en un bowl grande, mezclá la harina con la sal y el orégano seco. Agregá el ajo picado para darle un toque de sabor adicional. Formá un hueco en el centro y verté la mezcla de levadura y el aceite de oliva. Mezclá bien hasta que todos los ingredientes se integren y se forme una masa.
- Amasar: volcá la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasá durante unos 10 minutos, o hasta que esté suave y elástica. Si la masa está muy pegajosa, podés agregar un poco más de harina, pero no demasiada para evitar que quede dura.
- Dejar reposar: colocá la masa en un bowl ligeramente engrasado, cubrí con un paño húmedo y dejá que repose en un lugar cálido durante 1-2 horas, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Preparar la focaccia: precalentá el horno a 220°C (430°F). Engrasá una bandeja para hornear con un poco de aceite de oliva, colocá la masa en la bandeja y estirá con las manos hasta que cubra toda la superficie, presionando con los dedos para crear pequeñas hendiduras.
- Agregar los toppings: distribuí uniformemente las rodajas de chorizo, el queso fresco, el choclo tierno y las rodajas de jalapeño sobre la masa. Regá la superficie con un poco más de aceite de oliva.
- Hornear: colocá la focaccia en el horno precalentado y horneá durante 20-25 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
- Agregar palta y cilantro: una vez que saques la focaccia del horno, agregá las rodajas de palta y espolvoreá el cilantro fresco por encima.
- Servir: dejá que la focaccia se enfríe un poco antes de cortarla en porciones. Serví caliente o a temperatura ambiente, ¡y disfrutá de esta deliciosa fusión de sabores y culturas gastronómicas.
Fuentes:
- https://www.sanpellegrino.com/es/sparkling-drinks/recetas/focaccia-hierbas
- https://www.paulinacocina.net/focaccia-italiana/21911
- https://lamafia.es/3-platos-italianos-perfectos-para-acompanar-una-deliciosa-focaccia/
- https://hoycomemossano.com/2019/11/como-hacer-pan-de-pita-casero-receta-facil.html
- https://cocinartescuela.wordpress.com/2012/09/27/pan-pita-su-historia-y-receta/#:~:text=