Conocé el pulpo y sorprendé a todos con un exquisito pulpo a la gallega.
El pulpo a la gallega es una de esas recetas que captura la esencia de la gastronomía española en un cada bocado. Originario de Galicia, este plato ha conquistado paladares en todo el mundo gracias a su sencillez y sabor incomparable.
En este artículo, descubrirás todos los secretos detrás del auténtico pulpo a la gallega. Desde la selección del pulpo fresco y los trucos para lograr una textura perfecta, hasta los detalles de su preparación. También aprovecharemos para hablar sobre el pulpo en sí, qué es, sus características y alguno tips y trucos para su cocción perfecta.
¿QUÉ ES EL PULPO?
El pulpo es un molusco cefalópodo reconocido por su cuerpo redondeado y con ocho tentáculos provistos de ventosas. Su carne es blanca, pero al cocerse tiende a tornarse a tonalidades rosadas a rojizas, adquiriendo una textura firme y sabrosa.
El pulpo es muy apreciado en la gastronomía mundial, especialmente en la cocina mediterránea que una vez cocinado su carne ofrece una textura firme, tierna, jugosa y con un sabor único, que puede ser disfrutado solo o convirtiéndose así en el protagonista de innumerables recetas en combinación con otros ingredientes. Su presencia en la cocina es emblemática, destacando en preparaciones como ceviches, tacos o como el famoso pulpo a la gallega, donde su sabor único se realza con especias y aceite de oliva.
TIPOS DE PULPO QUE SE USAN PARA COCINAR
La imagen que todos tenemos del pulpo probablemente sea la misma, pero lo cierto es que existen numerosas especies donde no todos son iguales ni se comportan de la misma manera al cocinar. Entre las especies de pulpo comestible más destacados en la gastronomía están:
- Pulpo común: Es el más utilizado en la cocina debido a su sabor y textura. Se encuentra en la mayoría de las costas atlánticas y mediterráneas.
- Pulpo patón: Similar al pulpo común, pero con tentáculos más cortos y robustos. Ideal para recetas donde se busca una presentación más vistosa.
Pulpo blanco o pulpo de roca: Más pequeño y con un sabor más suave, ideal para ensaladas y platos fríos.
- Pulpo rojo: Encontrado en aguas más profundas, su carne es más firme y tiene un sabor más intenso.
- De anillos azules: Como su nombre lo indica, es reconocible por sus anillos azules alrededor del cuerpo, este pulpo tiene una carne firme y su sabor puede ser ligeramente más intenso que otras especies. Suele tener tentáculos más delgados.
Elegir el tipo de pulpo dependerá del plato que querás preparar, la disponibilidad en los mercados locales y de tus preferencias personales. Por lo general, para la receta de pulpo a la gallega, el pulpo común es la opción más tradicional y recomendada.
RECETA DE PULPO A LA GALLEGA
A la hora de hablar de recetas con pulpo probablemente una de las más famosas es el pulpo a la gallega o también conocido como pulpo a Feira, es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía española. Esta receta sencilla pero deliciosa consiste en pulpo cocido y cortado en rodajas, aderezado con pimentón, sal gruesa y un chorrito de aceite de oliva extra virgen, y servido sobre rodajas de papas cocidas.
Esta receta tiene su origen en Galicia, en el noroeste de España, esta preparación tiene sus raíces en las fiestas y ferias gallegas, donde tradicionalmente se cocinaba el pulpo en grandes calderos de cobre. Hoy en día, sigue siendo fiel a sus métodos tradicionales y se ha convertido en un símbolo de la cultura gallega.
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PREPARACIÓN DEL PULPO A LA GALLEGA
Cocinar pulpo puede parecer intimidante, pero con las técnicas adecuadas y los siguientes pasos podés lograr una preparación perfecta.
Preparación del pulpo: Dependiendo el lugar donde te esté, podés encontrar pulpo fresco o congelado. Si está congelado, descongelalo completamente. Luego, en una olla grande con agua hirviendo y sal, sumergí y retirá el pulpo tres veces antes de dejarlo cocer por completo. Este proceso, conocido como “asustar el pulpo”, ayuda a que mantenga su piel.
- Cocción del pulpo: Dejá cocinar el pulpo durante unos 30-45 minutos o hasta que esté tierno. Podés comprobar la cocción pinchando con un tenedor en la parte más gruesa de los tentáculos.
- Preparación de las papas: Mientras el pulpo se cocina, podés ir adelantando otra parte de la preparación que son las papas, para eso pelá y cortá las papas en rodajas gruesas y cocelas con agua y una pizca de sal hasta que estén tiernas.
- Servir: Una vez las papas estén listas, colocalas en el plato, luego añade las rodajas de pulpo encima. Espolvorea pimentón dulce y picante o paprika, una pizca de sal gruesa al gusto y finalizas con un generoso chorrito de aceite de oliva.
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TIPS Y TRUCOS PARA EL PULPO PERFECTO
Preparar pulpo es sencillo y rápido, pero muchos dudan por temor a que quede duro o incluso gomoso. Aquí te compartimos algunos consejos esenciales para preparar pulpo a la gallega u otra receta con este ingrediente.
- Pulpo congelado: Mientas que con otros ingredientes solemos preferir los frescos, en el caso del pulpo los expertos recomiendan optar por el congelado. Si lo adquiriste fresco, llevalo al congelador tan pronto llegues a casa. Congelar el pulpo es una técnica habitual para ablandarlo, ya que ayuda a romper las fibras musculares, resultando en una carne más tierna.
No lo pongas en la olla congelado: Si has utilizado esta técnica, es importante planificar con anticipación la preparación de esta receta. Descongelá el pulpo en la heladera el día antes de cocinarlo.
- Control del tiempo: El tiempo de cocción varía según el tamaño del pulpo, pero generalmente, entre 30 y 45 minutos son suficientes para un pulpo de tamaño medio. Es crucial no cocinarlo en exceso para evitar que se vuelva gomoso.
- Temperatura: Hervir el pulpo a fuego lento permite que se cocine de manera uniforme sin endurecerse.
PULPO FRESCO VS PULPO CONGELADO
Al momento de preparar pulpo a la gallega u otras recetas, una de las dudas más comunes es cuál de las dos presentaciones elegir: fresco o congelado. Cada una tiene sus ventajas y desventajas, por lo que la elección depende de tus prioridades y preferencias.
- Pulpo fresco: Ofrece un sabor intenso y profundo, una textura firme ideal para preparaciones a la parrilla o en crudo. Sin embargo, su disponibilidad puede ser limitada, su precio suele ser más elevado y requiere refrigeración inmediata con una vida útil corta.
- El pulpo congelado: Destaca su amplia disponibilidad durante todo el año y su facilidad de almacenamiento en el congelador por varios meses y la practicidad de venir limpio, eviscerado y sin tinta, listo para cocinar. No obstante, algunos expertos culinarios perciben un sabor menos intenso.
Como podés ver, los procesos de refrigeración y congelación nos ayudan a conservar de manera adecuada el pulpo, ya sea para consumir en unos días o en un par de meses, estos tratamientos retardan o inactivan respectivamente el crecimiento de microorganismos. Esto hace que el alimento dure más tiempo, sin perder su calidad y propiedades nutricionales.
Recordá descongelar el pulpo correctamente y cocinarlo inmediatamente, después de descongelarlo, no lo vuelvas a congelar. Registrate en Recetas Nestlé® y experimentá con diferentes recetas y descubrí las infinitas posibilidades que el pulpo te ofrece en la cocina.
FUENTES:
https://laroussecocina.mx/palabra/pulpo-2/
https://www.elreydelpulpo.com/curiosidades/pulpo/clases-pulpo-comestibles/
https://www.laflordegalicia.es/blog/especies-pulpos-comestibles